Una de las tantas consecuencias que ha traído la actual crisis financiera mundial es la caída del comercio y con esto la devaluación de los precios del mercado textil, tecnológico, automovilístico, entre otros, exceptuando alimentos.
No es un secreto que en la actualidad vender es una lotería y el comercio se la juega con espectaculares promociones que logran atraer al consumidor.
Sin embargo, la población en vista de tantas promociones mantiene una constante espera para lograr conseguir los precios más bajos.
Actualmente el sector automovilístico vive una crisis puntual en ventas que hace pensar en una evolución de la estrategia en las prácticas de distribución que han funcionado en los últimos diez años.
Así las cosas, tenemos el ejemplo de Renault quienes sacaron al mercado promociones y amplias facilidades de pago, creando una necesidad en el consumidor.
Por otra parte, el mercado textil día a día está en el trabajo de cumplir las expectativas de venta teniendo en cuenta la falta de dinero, pues lo que interesa es vender. En este momento cómodamente los consumidores vemos promociones de hasta el 90% de descuento en los almacenes, o lo que se ha vuelto típico pague uno lleve dos, lo que envuelve al cliente a tener grandes oportunidades de adquisición.
sábado, 21 de marzo de 2009
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